José Felipe Medina
Candidatos Bajo Acecho
Jueves 4 de abril del 2024
Apenas con unas horas de diferencia en que la candidata morenista a la alcaldía de Celaya, Guanajuato, Gisela Gaytán, había sido asesinada a balazos en su segundo día de campaña, el presidente Andrés Manuel López Obrador se atrevió a garantizar (de lengua me como un taco, dicen por acá) la tranquilidad y la paz en el proceso de transición de poderes y en el desarrollo de estas elecciones.
En verdad, Señor Presidente, cree Usted que los mexicanos estamos ciegos, sordos y mudos para no darnos cuenta de cómo el crimen organizado y desorganizado está metiendo, no solo la mano, sino todo el cuerpo, en estas elecciones? Quiere más pruebas? ¿Necesita más candidatos de su partido y opositores muertos para darse cuenta de la realidad? ¿En serio, Presidente?
Su aseveración parecería un chiste cruel, una bofetada a la inteligencia. En este estado de violencia que vive el país, nadie puede garantizar absolutamente nada.
“Esta transición va a ser muy tranquila, tersa y no va haber ningún problema y también diría la elección porque es muy doloroso, el asesinato de ayer de la candidata en Celaya, duele mucho, pero vamos a salir adelante”, expresó el presidente López Obrador en su Mañanera de este martes.
De acuerdo a la nota informativa de los colegas Emir Olivares y Alonso Urrieta, del periódico La Jornada, el mandatario aseguró que, a diferencias de otros sexenios, ya no predomina en el gobierno federal la asociación delictiva entre autoridades y la delincuencia.
“Ahora no se permite la impunidad y no establecemos relaciones de complicidad con nadie”, dijo.
¿Una transición muy tranquila y tersa? ¿No va a haber ningún problema? ¿Elecciones en paz? ¿Ya no hay asociación entre autoridades y delincuencia? ¿No se permite la impunidad? No hay relaciones de complicidad? ¿De verdad, Presidente?
Aunque no conozco una estadística oficial sobre el número de políticos, aspirantes a puestos de elección popular y candidatos que han sido asesinados en el actual proceso electoral, la cifra fácilmente ya es cercana a los 30.
El caso de Gisela Gaytán no es el único, pues. No. Ya son muchos los homicidios de este tipo de actores.
Un ejemplo más: este domingo 31 de marzo, y aunque por fortuna no hubo desgracias que lamentar, el vehículo en que viajaba la candidata a diputada federal en Guanajuato por Movimiento Ciudadano, Alda Pacheco, había sido interceptado también por sujetos armados que realizaron disparos al aire. Violencia electoral.
Hace poco más de quince días, en el municipio de Plutarco Elías Calles, en Sonora, cinco maestros fueron asesinados a balazos tras asistir a un mitin de apoyo a candidatos de Movimiento Ciudadano en Puerto Peñasco. Hicieron caso omiso a la parada en un retén operado por delincuentes, y recibieron metralla al por mayor. Si bien no fue un ataque directo a un candidato (a), tampoco es un hecho para verlo de soslayo.
Y es que la violencia electoral no parece disminuir…al contrario. En un recuento realizado en 2023 por Carmen Pizano, en PopLab, documentó que de 28 asesinatos de políticos, únicamente en cinco de ellos, la Fiscalía de Guanajuato había anunciado detenciones de presuntos responsables. Respecto a condenas ligadas a dichos casos, únicamente hubo una.
De acuerdo a la organización Laboratorio Electoral, Guerrero, Veracruz y Michoacán encabezan la lista de estados con mayor número de hechos violentos relacionados al actual proceso electoral, en la que se han registrado un total de 26 asesinatos a aspirantes o candidatos.
En su segundo informe, con corte el 29 de marzo, advirtió que el número de asesinatos ya supera a los registrados en 2018 (24). Mientras que en 2021 se reportaron 30 asesinatos de candidatos y aspirantes.
Y eso que apenas las campañas locales recién empiezan. Los grupos del crimen organizado buscan principalmente tener el control de las alcaldías, porque ahí está el verdadero negocio “institucionalizado”. Así que por desgracia, seguiremos contando muertes durante estas próximas semanas, aunque nuestro Presidente nos jure y perjure garantizarnos paz y tranquilidad.
Ojalá que nos equivoquemos.
Se acuerdan que en el despacho de este martes les comentaba que los candidatos a la alcaldía de Hermosillo, Toño Astiazarán (Prianrd) y María Dolores del Rio (Morena y aliados), no responderían al reto lanzado por Natalia Rivera, candidata de Movimiento Ciudadano al mismo puesto, para asistir a entregar sus declaraciones patrimoniales en su carrera como funcionarios públicos, ante el Comité de Participación Ciudadana del Sistema Estatal Anticorrupción? Pues qué creen?. No respondieron. Ya les decía: candidata no impone agenda a otros candidatos. Y menos a los que van arriba en los números, según casas encuestadoras. Sin duda, Natalia Rivera será una formidable contrincante para Toño y María Dolores, pero insisto, la marca no le ayuda. “El producto es bueno…la marca es mala”, diría Javier Gándara, otrora candidato priísta a la alcaldía de Hermosillo, quien después cumpliera su sueño…pero por el PAN.
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