Hermosillo, otra vez el infierno…

r4
r4
10 Min Read

Columna El Zancudo

Arturo Soto Munguía

Hermosillo, otra vez el infierno…

Lunes 3 de noviembre de 2025

Dieciséis años después, una densa columna de humo ensombreció otra parte de Hermosillo. Hizo aullar las sirenas, detonó los gritos de terror, convirtió a hombres, mujeres y niños en teas humanas, o los asfixió, intoxicándolos de gases venenosos en la desesperación por abandonar aquel pandemonio, reino de la confusión y el caos en que se convirtió un establecimiento comercial en el que inopinadamente realizaban algunas compras.

 23 muertos ¡23 muertos, carajo!, y doce lesionados fue el saldo del incendio en la tienda Waldo’s, una exitosa franquicia que tiene más de 900 sucursales en todo México, 68 de ellas en Sonora; allí se venden productos para un mercado popular, de bajo presupuesto, en su mayoría traídos desde China, pero también de EEUU.

 Fin de semana, días de pago y vísperas del Día de Muertos, dolorosa paradoja porque quizá muchos de quienes allí se encontraban buscaban artículos para  decorar altares y ofrendas a sus seres queridos sin imaginar jamás la trampa  mortal en la que entraron ese sábado al filo de las tres de la tarde.

 Dos cortes de energía eléctrica se registraron antes de que una terrible explosión -al parecer de un transformador- reventara los tímpanos y llenara el local de fuego y humo. Los testimonios recogidos por los reporteros y reporteras diaristas, las transmisiones en vivo documentaron las dimensiones de la tragedia y anticiparon las secuelas que invariablemente aparecen en estos casos.

 A la tragedia de los muertos y heridos le sigue la otra, la que siempre aparece tras una conflagración: la de los reclamos, las investigaciones, los descubrimientos, el deslinde de responsabilidades, las historias personales que llenan de dolor y luto,  de indignación y sorpresa; de rabia y desencanto.

 Nadie sale, digamos, a comprar tortillas esperando que el tanque estacionario explote y lo mate. La señora que vino desde Baviácora, un pintoresco pueblito del Río Sonora ubicado a unos 130 kilómetros de la capital, nunca pensó que aquella tarde de compras en lugar de los artículos que buscaba encontraría la muerte.

 Quién tiró los dados y en dónde, para que a esa hora y en ese lugar se encontrara, por citar un caso, una enfermera originaria de Guaymas que, acompañada de sus hijos -una niña y un niño, menores de edad- estuvieran allí cuando el estruendo los mató. O la joven mujer embarazada que probablemente buscaba comprar algo para la niña que llevaba en el vientre cuando el fuego y el humo acabaron con sus vidas y las ilusiones de sus familias…

 Es el azar, sí, pero no es solo el azar. Hoy, como hace dieciséis años hay decenas de hogares enlutados. Aquella vez fueron los niños y niñas de la Guardería ABC; hoy es una lista random de personas que en el devenir de su cotidianidad simple y despreocupada repentinamente se encontraron de manos a boca con la muerte.

Es el azar, sí, pero también es un transformador dentro del establecimiento comercial que debió tener el visto bueno de la Comisión Federal de Electricidad después del dictamen de una de una Unidad de Verificación de Instalaciones Eléctricas. La CFE no puede conectar el servicio hasta demostrar que la instalación es segura y cumple con la normativa de la UVIE, que a su vez debe ser acreditada por la Secretaría de Energía (SENER).

 Es el azar, sí, pero también son las responsabilidades de las instancias de Protección Civil estatal y municipal para autorizar la operación de los establecimientos comerciales en condiciones que garanticen seguridad para empleados y clientes, lo que, de acuerdo a lo informado ayer por el secretario de Gobierno, Adolfo Salazar Razo no aplica en este caso, pues el local ubicado en el centro de Hermosillo no contaba con un programa autorizado por Protección Civil estatal desde 2021. Fue aprobado en 2019 y revalidado en 2020, pero al entrar la nueva administración estatal, se concluyó en sentido negativo y “cada trámite, cada permiso está en revisión y es parte de la investigación de la Fiscalía”, dijo.

 La historia apenas comienza. Se supone que cuando un particular compra un transformador, este tiene que ser donado a la CFE porque pasa a ser parte de la red de distribución de fluido eléctrico, pero la paraestatal ya se deslindó del siniestro argumentando que el transformador no era suyo.

 Tanto el gobernador Alfonso Durazo como el alcalde de Hermosillo, Antonio Astiazarán se han comprometido a brindar apoyos y acompañamiento a las familias de las víctimas.

 La historia, sin embargo, apenas comienza.

 II

 En el despacho del pasado viernes hablábamos de la ‘semana de gatos negros’ para la presidenta Claudia Sheinbaum. Pero no imaginábamos que el fin de semana fuera peor.

 Carlos Manzo, el alcalde de Uruapan, exdiputado federal morenista que llegó a la presidencia municipal después de romper con Morena y postularse como candidato independiente, fue arteramente asesinado mientras recorría una plaza  pública en la celebración del Día de Muertos -para seguir con las amargas paradojas- y la ejecución cimbró al país entero por muchas razones.

 Michoacán es un estado icónico en el tema de la criminalidad en el país. Allí empezó la llamada ‘Guerra contra el narco’ que inició Felipe Calderón a petición del entonces gobernador Lázaro Cárdenas Batel, que después fue jefe de asesores del presidente López Obrador y hoy se desempeña como Jefe de la Oficina de la presidenta Sheinbaum.

 Carlos Manzo adquirió notable exposición mediática porque desde hace meses asumió una política frontal contra los grupos de la delincuencia organizada que operan en esa región y giró instrucciones a sus policías municipales para disparar contra ellos cuando así lo requiriera la situación. Fue enfático y reiterativo en solicitar al gobierno federal mayores apoyos para combatir el crimen en un estado donde las organizaciones criminales dominan el territorio y asuelan las actividades productivas.

 Recientemente fue asesinado en Apatzingán el líder de los productores de limón, Bernardo Bravo, por sus denuncias contra el ‘cobro de piso’ en un estado donde la ‘maña’ ha llegado a talar huertas enteras de árboles de limón porque sus dueños no cubren sus exigencias, que representan miles de millones de pesos. Pasa lo mismo con los productores de aguacate.

Carlos Manzo tenía protección de sus policías municipales en su entorno personal, y de la Guardia Nacional en el perímetro donde se movía. Nada fue suficiente: un asesino solitario llegó hasta él en medio de una celebración pública y le disparó a mansalva. Luego cayó muerto a balazos de la escolta del alcalde.

 Las estampas del crimen recorrieron el mundo, para alimento de la desesperanza en México.

El ‘control de daños’ o ‘manejo de crisis’ fue peor. Desde la presidencia de la República se lamentaron los hechos, se manifestó la solidaridad y se refrendaron compromisos en el combate al crimen organizado mientras, paralelamente, se registró un impresionante operativo para criminalizar a la víctima del atentado, sostener que tenía vínculos con otro grupo criminal y descalificar a cualquiera que condenara el asesinato.

 El cartabón fue más que evidente. El guion estaba dictado y fue terrible: a Carlos Manzo lo mató la derecha prianista a la que le urgía un mártir y quien opinara lo contrario forma filas en esa derecha que comanda Calderón, de manera que quien pudiese indignarse por la sumaria ejecución de un presidente municipal que eligió plantarle cara al narco, en realidad es parte del narco que busca desestabilizar al gobierno federal.

 Pero las cosas escalaron. El palacio de gobierno fue tomado en Morelia por una turba de gente enojada; en el funeral de Carlos Manzo, el gobernador Ramírez Bedolla fue corrido entre gritos de ‘asesino’ y hasta se llevó un ‘zape’ de una señora a la que no le importó la investidura gubernamental y le dio un manazo que birló toda la seguridad personal del gobernador.

 Algo se está descomponiendo y cada vez hay más balazos y menos abrazos. Del otro lado de la frontera, al norte, Trump sonríe…

 También me puedes seguir en X: @Chaposoto

Visita www.elzancudo.com.mx

Share This Article
Leave a comment