Legisladores demócratas de Texas exigen que de continuar con las restricciones al jitomate mexicano, EU tendrá una crisis económica y problemas de desabasto.
Tomado de El Financiero
Jassiel Valdelamar
Lunes 18 d agosto de 2025
Un frente de legisladores demócratas de Texas lanzó un llamado urgente al Departamento de Comercio de Estados Unidos para restablecer el Acuerdo de Suspensión del Jitomate Mexicano (TSA, por sus siglas en inglés), cuya cancelación, advirtieron, amenaza con desatar una crisis económica y de abasto en todo el país, con impacto particular en el sur de Texas.
La misiva, dirigida al secretario de Comercio, Howard W. Lutnick, y firmada por nueve congresistas texanos, denuncia que la decisión de imponer un arancel de 17.09 por ciento a las importaciones de jitomate mexicano responde a intereses políticos y regionales, particularmente los de productores de Florida, en detrimento de consumidores y negocios a nivel nacional.
Señalaron que el acuerdo de suspensión, vigente durante casi tres décadas, había permitido regular los precios, garantizar la calidad del producto y sostener decenas de miles de empleos.
¿Qué importancia tiene el jitomate mexicano en Texas?
Tan solo en Texas, la importación de jitomates mexicanos sostiene más de 150 negocios y miles de empleos directos, además de contribuir a una derrama económica que supera los 8 mil millones de dólares anuales en todo Estados Unidos.
“Suprimir el TSA significa debilitar un andamiaje que no solo mantenía a flote a cientos de empresas estadounidenses, sino que también daba certidumbre a los consumidores y apoyaba una cadena de abasto confiable”, advierten los legisladores en el documento fechado el 15 de agosto.
Los congresistas alertaron que el fin del acuerdo eliminará la supervisión obligatoria del Departamento de Agricultura (USDA) y de la Secretaría de Agricultura de Texas, responsables de inspecciones que garantizaban estándares de calidad y generaban casi 100 millones de dólares en ingresos anuales por servicios de revisión.
Sin el TSA, advierten, desaparece un mecanismo que aseguraba la inocuidad de uno de los productos más consumidos en el país.
“Es el consumidor quién pagará la factura: más altos precios en los supermercados, riesgo de escasez y un golpe a la confianza en la seguridad alimentaria”, subrayan los legisladores.
Los demócratas texanos también recordaron que los productores de Florida, considerados los beneficiados con la medida, no cuentan con la capacidad para abastecer la demanda nacional.
Prueba de ello fueron los episodios recientes de pérdida de cosechas por falta de mano de obra y fenómenos climáticos extremos, así como un brote de salmonela que puso en problemas la producción local..