Cinco empresas que donaron 3.5 millones de dólares a la campaña del republicano, recibieron contratos por 11 mil millones para vigilar, encarcelar y expulsar migrantes.
Tomado de Milenio
Témoris Grecko
Miércoles 30 de julio de 2025
Donald Trump abre la llave del presupuesto de los Estados Unidos con la aprobación de una nueva polémica ley, no sólo para combatir con mayor fiereza a la migración, sino para beneficiar con contratos millonarios a empresarios que donaron generosas sumas de dinero durante su campaña presidencial y para apoyar las actividades del Partido Republicano.
Pero el neoyorkino no se conforma con intensificar las redadas y las deportaciones, quiere un ‘palantir’ que le permita ver todo lo que pasa en su país. En la novela El señor de los anillos, de JRR Tolkien, los magos usan estas bolas de cristal indestructibles para vigilar al mundo. Ahora, el líder republicano está en vías de tener su propio oráculo.
¿Cuál es el plan de Donald Trump?
Y a eso aspira Palantir Technologies, empresa que contará con mayores recursos e información privilegiada para identificar migrantes; o CoreCivic y GEO Group, que construirán y reactivarán centros de detención; a esas se suma Anduril Industries, que edificará torres de vigilancia en la frontera con México, y Fisher Sand & Gravel, que levantará 43 kilómetros de muro fronterizo en Arizona.
La gran coincidencia es que en su conjunto estos cinco consorcios aportaron 3.5 millones de dólares a la campaña del entonces candidato Donald Trump y, ahora que es presidente, han recibido contratos por un monto estimado de 11 millones de dólares.
Este grupo de compañías está entre los mayores beneficiarios del inmenso pastel de la One Big Beautiful Bill Act (OBBBA, que podría traducirse como “Una grande y hermosa ley”), aprobada el 3 de julio por el Congreso tras un accidentado proceso legislativo.
La legislación establece gastos de dimensiones históricas en distintas áreas, entre las que están varias relacionadas directamente con México, la frontera binacional y los migrantes: 150 mil millones de dólares para defensa, 45 mil millones para el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE), y 46 mil 500 millones para infraestructura fronteriza, incluyendo muros y sistemas de vigilancia.
Trump realizará este gasto contra los migrantes, junto a otros egresos enormes y un endeudamiento gigantesco, a pesar de que él mismo presume que su administración alcanzó ya “el nivel más bajo de cruces fronterizos irregulares diarios jamás registrado”.
La persecución de migrantes es un negocio redondo. Y para fortalecerlo necesita sus palantir.
Palantir Technologies: todo bajo el ojo de Trump
En 2023, Peter Thiel, uno de los primeros inversionistas de Facebook y luego fundador de PayPal junto con Elon Musk, anunció que no haría donaciones políticas en 2024 a ningún candidato, incluido Donald Trump, a quien había apoyado en 2016. Quizás fue entonces que se acordó de revisar su palantir y lo que vio, lo hizo dar un giro de 180 grados.
Trump le dio nada menos que la candidatura a la vicepresidencia a un protegido de Thiel, JD Vance. Aunque no se han comprobado donaciones de Thiel el año pasado, en este sí ha hecho públicas varias con el objeto expreso de asegurar que los republicanos mantengan el control del Congreso en las elecciones de 2026.
Reveló que aportó un monto total de 852 mil dólares al Comité Nacional Republicano, a los republicanos del Congreso, a los comités republicanos en 14 estados y a 29 representantes (diputados).
Palantir Technologies, que él cofundó en 2004, tiene un sistema de inteligencia artificial que permite a sus clientes, como el ejército, las policías y las agencias migratorias, analizar datos personales a niveles masivos, incluyendo perfiles en redes sociales, información personal y características físicas, que sirven para identificar y vigilar a las personas hasta el nivel micro.
En marzo pasado, Trump firmó una orden ejecutiva que exige a todas las agencias y departamentos del gobierno federal compartir datos sobre los estadunidenses con Palantir Technologies, que recibió un contrato de 30 millones de dólares.
Su software ImmigrationOS ha desempeñado un papel fundamental en las deportaciones masivas de migrantes y ahora, con las asignaciones previstas en la nueva ley, podrá servir para reunir, en una sola base de datos, toda la información del Departamento de Seguridad Nacional, el Departamento de Defensa, el Departamento de Salud y Servicios Humanos, la Administración del Seguro Social y el Servicio de Impuestos Internos.
Los números de cuentas bancarias y las reclamaciones médicas estarán en las computadoras de Peter Thiel.
Pero no sólo eso: Trump recortará impuestos a las personas más ricas, como Thiel, y a las empresas más grandes, como Palantir Technologies, la cual se podrá ahorrar 86 millones de dólares.
CoreCivic y GEO Group: el negocio de encerrar migrantes
El polémico complejo llamado Alligator Alcatraz, que sirve para retener a unos 5 mil migrantes en una zona de Florida infestada de lagartos, es sólo el adelanto de un enorme programa para construir centros de detención similares.
El negocio les ha sido entregado a operadores privados de prisiones que también han sido muy generosos con Trump: CoreCivic y GEO Group.
El 7 de abril, el ICE emitió una solicitud de propuestas por 45 mil millones de dólares a contratistas privados para aumentar la capacidad de detención.
Incluso antes de que el Congreso aprobara la “grande y hermosa ley”, a finales de junio, CoreCivic y GEO Group ya habían obtenido nueve contratos nuevos o ampliados, y reabrieron centros como Delaney Hall en Nueva Jersey, gestionado por GEO, y los centros de detención familiar Dilley y Karnes en Texas, gestionados en conjunto.
En un informe, el grupo Citizens For Responsibility and Ethics in Washington señaló que:
“Es probable que gran parte de los nuevos fondos beneficie a CoreCivic y GEO, ya que simplemente pueden reabrir 14 centros inactivos y, además, tienen la capacidad de construir nuevos centros en un plazo de 12 a 18 meses, en comparación con los cuatro a cinco años que tardaría el sector público”.
Las dos empresas no se hicieron esperar para compartir con sus accionistas los montos que les repartirá el ICE: mil 960 millones de dólares para CoreCivic y dos mil 410 millones para GEO Group.
La apuesta de CoreCivic y GEO Group fue acertada en términos de negocio: sus comités de acción política, sus subsidiarias y su director ejecutivo donaron 2 millones 779 mil dólares a la campaña de Trump.
Anduril Industries y Fisher & Sand Gravel: Oro en la frontera
Palmer Luckey, de Anduril Industries, se presenta como víctima al afirmar que fue despedido de Facebook por donar dinero a la primera campaña de Trump en 2016 (la empresa lo niega), y quien este año organizó grandes eventos de recaudación de fondos para el líder republicano en Beverly Hills y Newport Beach, California.
Luckey fue casi señalado con nombre y apellido en la nueva ley para recibir contratos por 6 mil millones de dólares para construir torres de vigilancia en la frontera con México.
El texto dice que solo pueden participar empresas cuyos productos hayan sido “probados y aceptados por la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza”, además de que puedan ofrecer:
“’Capacidades autónomas’ de Inteligencia Artificial, aprendizaje automático y visión para detectar, identificar, clasificar y rastrear a personas en tiempo real, sin control humano continuo”.
Esto es, según el portal de investigación The Intercept, “una descripción del producto de Anduril Industries”, la empresa de Luckey, quien fuera considerado niño genio cuando a los 16 años desarrolló las gafas de realidad virtual Oculus.
Por su lado la empresa Fisher Sand & Gravel y sus ejecutivos donaron más de 500 mil dólares a causas republicanas en 2024, incluyendo 200 mil a la campaña de Trump. En junio pasado recibió un contrato por 309 millones de dólares para construir 27 millas de muro fronterizo en Arizona.