Columna Corren Rumores
Hilario Olea
Chequen la letra chiquita
Lunes 30 de junio de 2025
AGUAS CON LOS TRANSITORIOS… Dicen que es importante checar la letra chiquita en los contratos que firmamos, porque por ahí se puede colar el diablo y ponernos una friega. En cuanto a las leyes, una queridísima y talentosa amiga Marina Galaz nos decía que había que fijarse en la redacción final, pero sobre todo en los artículos transitorios, que esos por lo general nadie les pone atención hasta después de que se aprueba el articulado principal. Ahora, hay que fijarse como quedó la Ley de Telecomunicaciones y Radiodifusión, porque de entrada se ve bien, pero deja abierta la puerta a volverse una ley espía que se puede usar contra la oposición o para el canibalismo de los mismos grupos de la 4T, como en su tiempo pasó con el PRI, donde los más vigilados eran los mismos priistas enemigos del grupo en el poder. Aguas, porque están advertidos.
LETRA CHIQUITA… Los legisladores oficialistas aplaudieron de que ahora ya no sacará del aire a las plataformas digitales como venía en la ley original, pero dejaron la trampa puesta para que puedan hacerlo a fin de cuentas porque al final de aprobó una reserva chapucera de Morena para que se pueda suspender transmisiones, pero con previo apercibimiento a los concesionarios. O sea, todo es cosa de que se avise de que se suspenderán estaciones, plataformas y redes sociales, solo es cosa de avisar que viene el golpe. O sea sigue como era, que no se requiere juicio previo. Cuando menos eso es lo que se entiende, a menos que por ahí ande una letra chiquita redactada por el diablo.
QUEDA LEY ESPÍA… La que también pasó con gritos y todo, fue la llamada Ley Espía, la cual por mayoría de votos de los diputados de Morena y sus aliados, fue aprobada en las comisiones unidad de Seguridad Pública y Estudios Legislativos del Senado, la Ley del Sistema Nacional de Investigación e Inteligencia en Materia de Seguridad Pública, llamada también “Ley Espía” que según la oposición promueve un modelo de vigilancia masiva sin controles judiciales. Ahora todo es cosa de estar en la lista negra para ser vigilado ahora si que en todo sentido, no solo mediante espionaje telefónico. Desde luego que esto es muy tentador si llegamos a tener un estado autoritario. Ahorita se están guardando las apariencias, pero eso puede terminar si Morena ve amenazado su control electoral y de gobierno. Entonces vaya que apretaría.
LA DICTADURA PERFECTA… La oposición insiste en advertir que de acuerdo a lo que se ha venido aprobado en el Congreso vamos rumbo a una dictadura perfecta. El priista Miguel Riquelme advirtió que con esto se consolida, en primer lugar, la militarización de la seguridad pública y se tiene acceso a todos los datos personales de los mexicanos. Al alcance, faltó decir, de un teclazo de computadora. Al fin oposición aprovechó para advertir que “Están construyendo una dictadura perfecta, disfrazada de modernización, donde la vigilancia masiva y la militarización serán los instrumentos para silenciar la disidencia y aplastar la esperanza. La libertad es el alma de México. Nuestra vida privada es un derecho sagrado que ninguna ley autoritaria debe violar”. Vaya entonces que se pone de buenas a mejor. Por lo mismo, de ahora en adelante recuerde lo que dice por teléfono o maneja en redes sociales, porque literalmente “ un mundo nos vigila”. Claro que si no hace olas o provoca incomodidades al sistema, no pasará nada y será un ciudadano anónimo más. Pero de todos modos, aguas. Advertidos están.
En fin, inicio de semana por eso recuerden lo que decía el Pitufo Maldonado: Más vale pájaro en el alambre que ver un ciento en las redes. Sale.
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