Columna Olor A Dinero
Feliciano J. Espriella
Trump-Sheinbaum: ¿tensar o negociar?
Martes 17 de junio de 2025
En el primer encuentro entre Claudia Sheinbaum y Donald Trump, todo está en juego: migración, comercio, seguridad y el tono futuro de la relación bilateral. La diplomacia mexicana se mide hoy en su prueba más difícil.
¿De qué hablará Sheinbaum con Trump?
Hoy, de las 15:40 a las 16:40 horas (hora local de Kananaskis, Canadá), en el marco de la Cumbre del G7 en Alberta, se celebrará la primera reunión entre la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, y el presidente de Estados Unidos, Donald Trump. Un encuentro crucial que busca abrir canales de diálogo y alcanzar acuerdos, pese al clima de tensión que ha marcado recientemente la relación bilateral.
La agenda oficial incluye:
Migración: Sheinbaum ha adelantado que defenderá a los migrantes mexicanos y rechazará las redadas antiinmigrantes.
Comercio bilateral: se discutirá sobre aranceles y la relación económica entre ambos países.
Seguridad fronteriza: temas de cooperación en el combate al tráfico de drogas y seguridad común.
Remesas: posible imposición de gravámenes a las remesas enviadas desde EE. UU. a México.
Pero, ¿será eso todo? ¿Cuál de estos temas querrá Trump utilizar para obtener mayor ventaja? Y por el otro lado, ¿cuál será la prioridad de Sheinbaum y en qué buscará concretar acuerdos?
No exagero al afirmar que esta es la reunión bilateral más importante entre México y Estados Unidos en medio siglo. El planeta arde en conflictos, y las relaciones internacionales no atraviesan su mejor momento. La forma en que se gestione este encuentro puede marcar un antes y un después en la política exterior mexicana.
Algunos analistas han sugerido que Sheinbaum podría ser menospreciada, incluso humillada por Trump. Personalmente, lo considero improbable. No porque Trump haya perdido su arrogancia, sino porque enfrenta una avalancha de problemas internos y externos que lo tienen contra las cuerdas. Avivar un conflicto con México sería encender un incendio más en su ya caótica presidencia.
Sin embargo, conociendo su temperamento irascible e impredecible, todo puede suceder. Del otro lado, Sheinbaum ha demostrado temple e inteligencia para manejar situaciones incómodas. Tiene los reflejos políticos necesarios para sortear un desliz o una provocación, y salir airosa.
Este es el primer encuentro presencial entre ambos desde que asumieron sus cargos: Trump en enero de 2025, Sheinbaum en octubre de 2024. Llega en un contexto enrarecido por varios focos de tensión:
Protestas en Los Ángeles contra redadas migratorias.
Acusaciones de Kristi Noem, secretaria de Seguridad Nacional de EE. UU., quien culpó a Sheinbaum de incitar las protestas. La presidenta respondió calificándolas de “absolutamente falsas”.
La amenaza de gravar remesas.
Disputas arancelarias y comerciales.
Pese a este entorno complejo, todo indica que Sheinbaum llega preparada. No improvisa. Ha dedicado al menos siete meses a estudiar el perfil de Trump: leyó todos sus libros, analizó su primera administración al detalle y preparó minuciosamente cada conversación previa, incluso ensayando respuestas en inglés para evitar intermediarios y mejorar la interlocución directa.
Su estilo contrasta con el de su antecesor, Andrés Manuel López Obrador. Es otra forma de hacer diplomacia. El propio Trump, poco dado a los halagos, la ha descrito como “encantadora e inteligente”.
Hablarán de migración, comercio, seguridad y remesas. Pero lo que realmente estará en juego es el tono de la relación México-Estados Unidos en los próximos años. Si Sheinbaum logra equilibrar firmeza y diplomacia, podrá imponer respeto y abrir la puerta a una relación menos desigual.
Al terminar de escribir esta columna, comenzó a circular la noticia del apresurado regreso de Trump a Washington debido al agravamiento del conflicto en Medio Oriente. Sin embargo, las consideraciones aquí expuestas seguramente seguirán vigentes en una eventual reunión bilateral entre el presidente estadounidense y nuestra presidenta, la cual tendrá que realizarse en un futuro no muy lejano
Por hoy fue todo. Gracias por su tolerancia, y hasta la próxima.
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