Cuando el PIB cae… y la derecha se frota las manos

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Columna Olor A Dinero

Feliciano J. Espriella

Cuando el PIB cae… y la derecha se frota las manos

Viernes 25 de abril de 2025

Mientras algunos celebran la proyección de una contracción económica como si fuera una victoria política, conviene revisar de dónde vienen esas cifras, qué tan  fiables son… y quiénes realmente pagan el precio de una recesión, sea técnica o no.

Suponiendo sin conceder —como dicen los abogados— que nos encontremos en una recesión técnica cuyos orígenes, me atrevo a afirmar, son totalmente independientes del manejo gubernamental de la economía (lo cual no obsta para que se lo achaquen a López Obrador, Claudia Sheinbaum y la 4T), a quienes se  sienten “horrorizados” por ello, utilizando la jerga de los cholos, les digo: ¿Qué pe’s con eso?

El Fondo Monetario Internacional (FMI) anticipó que la economía mexicana registrará una contracción del 0.3% este año, una previsión que incorpora un recorte de 1.7 puntos respecto a su expectativa de enero pasado, cuando  proyectaban un crecimiento del 1.4%.

El nuevo pronóstico ubica a México como la única economía del G-20 con perspectiva negativa.

“Es una contracción media, no una recesión”, matizó Petya Koeva, subdirectora de investigación económica del FMI. “Una recesión es lo que se vivió en 2020. La previsión actual es de una contracción del 0.3%, que no puede llamarse recesión”, puntualizó.

Esta contracción —entiéndase bien: ESTIMADA— fue, durante los dos días anteriores, objeto de una enorme difusión con tinte amarillista, cortesía de quienes se la pasan orando y con los dedos cruzados para que le vaya mal al país. ¡Imbéciles! Como si ellos estuvieran vacunados contra las consecuencias de una caída económica. Pero se entiende: el Señor y la naturaleza fueron excesivamente frugales con ellos a la hora de repartir neuronas.

Aunque el FMI deja claro que sus estimaciones se refieren únicamente a las economías del G-20, siguiendo su instinto catastrofista —marca registrada de la  derecha cuando analiza gobiernos progresistas—, algunos decidieron extender alegremente esa afirmación a todo el planeta, como si entre los otros 200 países no hubiera alguno más con caída de PIB.

Ayer circuló profusamente la portada de un medio impreso llamado El Independiente (con evidentes tintes de pasquín amarillista), cuya nota principal se refería a la caída del PIB mexicano proyectada para 2025. El artículo —por llamarlo de alguna manera— fue cabeceado con este falaz, perverso e insidioso titular:

“MÉXICO, ÚNICO PAÍS EN EL MUNDO CON CAÍDA DEL PIB EN 2025: -0.3%”.

Conviene señalar que la proyección del FMI, y de otras entidades financieras que manejan cifras similares, contrasta significativamente con la estimación de la Secretaría de Hacienda, que proyecta un crecimiento de entre 2% y 3% para 2025.

Nada nuevo. Ha sido la tónica durante al menos los últimos seis años.

Un botón de muestra: en octubre de 2022, el FMI pronosticó un crecimiento del 1.2% del PIB para 2023. Luego, el 31 de enero de 2023, lo ajustó a 1.7%. Sin embargo, el INEGI reportó que el PIB mexicano creció 3.2% en 2023. Una diferencia enorme, casi, casi, el doble.

El año pasado ocurrió algo similar, aunque con una desviación menos dramática.

Será importante seguir de cerca la evolución económica en los próximos trimestres para ver si estas proyecciones se confirman o, como sugiere la presidenta electa Claudia Sheinbaum, el Plan México (con inversiones  proyectadas por 275 mil millones de dólares) logra contrarrestar estas tendencias negativas.

Y para cerrar el tema: el FMI no es, ni por mucho, el non plus ultra de la precisión económica. Además, el PIB es solo un indicador macroeconómico que mide crecimiento, pero no necesariamente bienestar social.

La mejor prueba es el sexenio lopezobradorista:

En 2020, el PIB cayó 8.5%, la mayor contracción desde 1932, y el sexenio ha sido el de menor crecimiento económico en el siglo.

Pese a ello:

•          Cerca de 10 millones de personas salieron de la pobreza

•          El salario real tuvo el mayor incremento registrado

•          El desempleo bajó a niveles históricos

•          El consumo interno creció de forma sostenida y significativa en términos reales

Por hoy fue todo. Gracias por su tolerancia y hasta la próxima.

Twitter: @fjespriella

Correo: felicianoespriella@gmail.com

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